Tu economía familiar necesita atención, no fórmulas mágicas
Trabajamos con familias de Valencia que saben que sus finanzas pueden mejorar, pero no encuentran por dónde empezar. Aquí no hay trucos ni promesas imposibles — solo conversaciones francas sobre tu dinero real.
Hablemos de tu situaciónPor qué las familias pierden el control de su dinero
La mayoría de familias valencianas con las que hablo tienen el mismo problema: ganan bien, pero a final de mes no saben dónde se ha ido todo. No es que gasten mal necesariamente — es que nadie les enseñó a organizar ingresos que entran de diferentes sitios en diferentes momentos.
El año pasado trabajé con una familia que tenía tres fuentes de ingresos irregulares. Creían que estaban ahorrando, pero en realidad cada mes sacaban de la hucha anterior para cubrir gastos corrientes. Tardamos cuatro meses en montar un sistema que realmente funcionara para ellos.
Lo que funciona para una pareja sin hijos no sirve cuando llega el primero. Y lo que funcionaba con uno, se rompe con el segundo. Cada etapa familiar necesita ajustes — no puedes aplicar la misma estructura diez años seguidos y esperar que encaje.
Cómo organizamos el dinero de una familia real
Primera conversación sin papeles
Antes de mirar números, hablamos de lo que te preocupa de verdad. A veces el problema no está donde crees — muchas familias piensan que gastan demasiado cuando en realidad tienen mal distribuidos los ingresos entre cuentas.
Radiografía de tres meses
Necesito ver al menos un trimestre completo de movimientos. No para juzgar dónde gastas — para entender el ritmo de tu economía. Hay familias con ingresos estables y otras donde cada mes es diferente. El sistema debe adaptarse a tu realidad, no al revés.
Estructura que puedas mantener tú mismo
Si te monto algo complicado que requiere actualizarlo cada semana, abandonarás en dos meses. El objetivo es que después de trabajar juntos tengas un sistema tan simple que lo sigas usando años después sin mi ayuda.
Seguimiento cuando lo necesites
Algunos clientes vuelven cada año para revisar. Otros aparecen cuando cambia algo gordo — un nuevo hijo, un cambio de trabajo, la compra de una casa. No hay compromiso permanente ni cuotas mensuales forzadas.
Lo que realmente cambia en tu economía familiar
Después de reorganizar tus finanzas, no vas a duplicar tus ingresos ni ahorrar milagrosamente la mitad de tu sueldo. Pero sí vas a saber exactamente cuánto puedes gastar sin estrés y cuánto estás acumulando para lo que viene.
Gastos claros por categoría
Sabes cuánto va a vivienda, cuánto a colegio, cuánto a variable. Sin sorpresas a mitad de mes porque se te olvidó el seguro del coche.
Colchón para imprevistos reales
No hablo de ahorrar para vacaciones en Bali. Me refiero a tener cubierto si se rompe la lavadora o el coche necesita reparación urgente.
Decisiones sin culpa
Si está dentro del presupuesto que montamos juntos, gastas tranquilo. Se acabó el "no sé si podemos permitírnoslo" cada vez que surge algo.
Por qué no trabajo con todo el mundo
Esto funciona mejor con familias que tienen ingresos regulares y quieren organizarse mejor. Si buscas estrategias de inversión agresivas o planificación fiscal compleja, hay profesionales más especializados que yo en esos temas.
Tampoco puedo ayudarte si tienes deudas serias sin controlar — primero necesitas estabilizar esa situación con otro tipo de asesoramiento. Mi trabajo empieza cuando ya tienes los números en positivo y quieres mantenerlos así mientras construyes algo más sólido.
- Primera reunión sin coste para ver si encajamos
- Trabajo basado en tu situación real, no en teorías generales
- Sistemas que puedas mantener sin depender de mí cada mes
- Disponibilidad para revisiones cuando tu vida cambie